De repente nada.
Volvió a ocurrir.
El tiempo se detiene
en el transcurso del invierno
en pueblos
mermados en población,
pero no en recursos.
Desaprovechados
en facilidades para
el asentamiento
de nuevas generaciones.
Para que los residentes
veraneantes
acudan más a menudo.
Inédito (Descarte del poemario inédito HGBQUDM)
3 opiniones:
30 de noviembre de 2009, 3:25
Tu poema me trae nostalgia de tardes de invierno delante de la estufa, con los pies en el brasero, viendo películas tontas de sobremesa y tomando te... Corriendo calle abajo desafiando a la lluvia para tomar una cerveza con tosta que sabía más que bien, escuchando el reloj de la plaza, que por alguna razón cuando hace frío ruge más fuerte, y el despertar calentito entre las sábanas con pereza por no tocar con los pies el gélido suelo del cuarto de baño...
Te imaginarás dónde...
Hay que escaparse ya!
30 de noviembre de 2009, 3:25
30 de noviembre de 2009, 19:31
Lápida sin epitafio
ni grandilocuencia ni añoranza.
Flores de plástico
de alguna amante no confesa
los primeros Días de Todos los Santos
Alpiste para gusanos
gasóleo para el olvido.
Su vida fue un desahucio
de convicciones y de bríos
Quedó desnudo
hasta en el epitafio.
Quedó exento de la ingravidez
de sus primeros deseos.
Quedó mudo
ante San Pedro en el cielo
y quedo ante el consuelo
carnal de los pecados.
Enviudó de
su amor propio
y se mimetizó
con el desarraigo de sus pasiones.
Murió dispuesto
y sin causa.
Sin último deseo
sin últimas palabras.
Publicar un comentario